Por muchas campañas preventivas que se hagan, veraneo y quemaduras solares van emparentados. Tanto que hasta existen fans de la cosa de las pieles enrojecidas que son capaces de organizar un extenso grupo en Flickr dedicadas a mostrar la inmensa variedad visual y colorida (con el rojo mandando) generada por eso de dejarse quemar más de la cuenta por los rayos solares que nos acechan estos días. Su casi medio centenar de miembros exhibe en Sunburn otras tantas muestras de las posibilidades (a veces hasta estéticas) de, por poner un ejemplo, el contraste entre las huellas (pálidas) de bañador y el resto de la epidermis dejada descuidadamente al sol.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 30 de julio de 2009