La línea del AVE en su trayecto Madrid-Sevilla-Málaga quedó ayer interrumpida a consecuencia de los daños causados en sus infraestructuras por una tormenta en la provincia de Toledo. El corte de circulación afectó a 14 trenes y 1.650 viajeros, según informó un portavoz de Renfe a la 1.30 -previamente, en un comunicado, Renfe hablaba de 16 trenes y 1.890 viajeros afectados-.
El tráfico ferroviario se interrumpió en esta línea a las 21.00, después de que la empresa Adif, Administradora de las Líneas Ferroviarias, detectara balsas de agua en las vías de La Sagra y Yeles (Toledo).
La suspensión afectó a seis trenes AVE que fueron suprimidos en origen (dos Málaga-Madrid, un Madrid-Málaga, dos Sevilla-Madrid, y un Madrid-Sevilla) además de a otros trenes que se encontraban ya circulando y que tuvieron que ser desviados. Tres de ellos fueron redirigidos a Toledo y uno más fue detenido en Puertollano. Todos estos viajeros fueron trasladados a Madrid en autobus, según el comunicado de Renfe.
También se vieron afectados cuatro trenes de media distancia que recorrían las rutas Madrid-Toledo y Madrid-Puertollano-Ciudad Real.
Un portavoz de Renfe informó de que la línea no sería restituida hasta hoy, siempre que la empresa Adif lo considerara oportuno. Un equipo de técnicos trabajaba anoche para restablecer la circulación.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 11 de agosto de 2009