Los piratas somalíes han recibido 2,8 millones de euros por la liberación de un remolcador de altura italiano que estaba secuestrado desde abril con 16 tripulantes a bordo, según manifestó uno de los miembros de la banda a la agencia Reuters. El Gobierno italiano negó que se hubiera pagado un rescate por medio del ministro de Exteriores, Franco Frattini, quien aseguró que la presión de las autoridades somalíes y de los servicios secretos italianos sobre los piratas fue suficiente. Eurojust, órgano de cooperación judicial de la Unión Europea, advirtió la semana pasada que el dinero de los rescates puede servir para financiar el terrorismo.
El remolcador Buccaneer había sido secuestrado el 11 de abril en el golfo de Adén y ayer se dirigía a Yibuti, escoltado por buques militares italianos que forman parte de la flotilla desplegada por varios países para patrullar las aguas de esta ruta marítima crucial, afectada por una piratería en ascenso. Su tripulación está formada por 10 italianos, cinco rumanos y un croata. Los piratas tienen apresados otros 10 barcos, dos de ellos secuestrados desde marzo.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 11 de agosto de 2009