Menos de 24 horas después de la cadena de atentados que sacudió Palma, la reina Sofía y las infantas Cristina y Elena salieron ayer de compras por el centro de la ciudad. Una muestra más de que la Familia Real no quiere que nada altere sus hábitos veraniegos en la isla. Durante algo más de una hora, la Reina y sus hijas visitaron diversos establecimientos del Born y de Jaume III, la vía comercial más exclusiva de la capital balear. Su presencia causó más sorpresa entre los turistas extranjeros que entre los vecinos y los propios comerciantes, habituados a sus paseos.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 11 de agosto de 2009