Miles de flecos, nueve piezas de fina seda bordadas a mano y unas pastas de té como premio. Es el concurso de mantones de las fiestas de La Paloma. Y aunque para Nati, la concursante con el mantón más caro -1.800 euros- lo importante es "el arte con que se lleva el mantón", el que finalmente resultó ganador fue el más antiguo.
Era el de Socorro, la número uno, que no se había vestido de chulapa porque su marido ya no estaba para bailar con ella el chotis. La mujer, muy chula, lucía un "mantón finísimo" de 1920. "Muéstramelo, déjamelo", pedía el presentador, que dejó asombrado al público con sus conocimientos sobre la materia. "Sí señora, con una conservación extraordinaria, con fleco de cantillana y con cuatro puestas distintas. ¡Una maravilla!", elogió. El concurso de piropos había sido el miércoles por la noche, pero Socorro aprovechó el comentario del presentador y se lanzó: "Si no tienes nada que hacer y quieres pasar un rato, acompáñame a dar un paseo al Rastro. ¡Ahí queda eso!".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 14 de agosto de 2009