Los tres detenidos el pasado viernes por los incidentes ocurridos en las fiestas de Bilbao, tras impedir el Departamento de Interior del Gobierno vasco dos manifestaciones de la izquierda abertzale, han quedado en libertad tras pasar a disposición judicial, según informó ayer la propia consejería.
Los altercados comenzaron sobre la una y media de la tarde del viernes en la Plaza Zabalburu, donde había sido convocada una de las marchas. En la calles adyacentes, los radicales volcaron contenedores, así como en otros puntos de la capital vizcaína y en el puente de Deusto. Los agentes de la Policía autonómica tuvieron que intervenir y se detuvo a tres persons.
Ya por la tarde, en una tercera protesta organizada por Etxerat -la habitual que se celebra todos los viernes- otra persona resultó imputada por haber realizado amenazas a la Ertzaintza.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 25 de agosto de 2009