El presunto asesino de María Mercedes, la niña dominicana de 12 años muerta en Vallecas a puñaladas el pasado 25 de julio, "reconoce la gravedad de los hechos" y "se muestra arrepentido". Así lo explicaron sus abogados ayer, después de que el Juzgado de Instrucción número 15 de Madrid tomara declaración al acusado de matar a la menor en su domicilio, Larquin Rodríguez Noboa, de 28 años. "Sufre una fuerte depresión y ha estado en seguimiento preventivo para que no se suicide", explicaron sus letrados, Javier Osés y Soraya Laborda, de Zaragoza, ciudad donde el acusado se entregó a la policía un día después de los hechos. Desde entonces permanece en prisión preventiva.
La abogada de la acusación particular, Cynthia Favero, a la espera de que el juez levante el secreto de sumario, adelantó que, en principio, mantendrán la acusación por asesinato. La madre de María Mercedes permanece todavía en su país, República Dominicana, donde fue enterrada su hija.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 26 de agosto de 2009