El sevillano Hospital de Valme atendió 171 casos de maltrato infantil -46 de ellos de abusos sexuales- en 2008, según el coordinador del Programa de Pediatría Social del centro, Juan Gil Arrones. "El maltrato infantil no interesa políticamente, no da votos ni da brillo", lamentó el pediatra, quien señaló que un año antes, en 2007, en el mismo centro contabilizó 164 casos de maltrato infantil; mientras que en 2006 fueron 85 casos.
Para contrastar estas cifras con las de otros tipos de violencia, el mismo hospital en 2008 atendió a 14 mujeres víctimas de violencia y en 2006 la cifra fue de 11 mujeres. El Hospital de Valme atiende a 400.000 habitantes, el 20% de los cuales es menor de edad, señaló Gil para dar una muestra de la magnitud del problema. "En Andalucía no se realiza un registro efectivo del maltrato infantil, porque está mal planificado. Se hizo una hoja de notificación de 'sospecha de maltrato y abusos sexuales' que no se cumplimenta porque no es operativa", añadió.
Sólo en Valme, en los diez últimos años, se han detectado más de 350 casos "altamente sospechosos" de abusos sexuales, entre el 20% y el 24% a niños. El 18% de los casos de maltrato infantil que se detectan ahora se da "entre iguales", o sea de menores que han sido agredidos por menores.
La mayor parte de los casos se producen en el ámbito familiar, en todas las clases sociales. En la mayoría de los casos, el abuso sexual lo cometen los padres y, en segundo término, otros varones de la familia; mientras que en los casos de palizas y desatención, los responsables son por igual padres y madres, explica Gil.
La Consejería para la Igualdad y el Bienestar Social -salvo las llamadas del Teléfono del Menor-, el Defensor del Menor y el Observatorio de la Infancia de Andalucía carecen de estadísticas sobre maltrato infantil.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 6 de septiembre de 2009