Huyó una primera vez, pero no lo consiguió la segunda. Eusebio J. C., de 25 años, ha vivido tres años ocultándose de la policía, hasta que este martes un grupo de agentes de la comisaría del distrito de Usera-Villaverde le detuvo. Está acusado de 25 robos con violencia o intimidación, cuatro robos con fuerza, dos hurtos y un delito de daños.
A finales de noviembre de 2006, los agentes del Grupo XIII de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid desmantelaron una banda de delincuentes que actuaba en la periferia de la Comunidad. Consiguieron detener a tres de sus miembros, pero Eusebio se les escurrió.
La banda estaba especializada en asaltos relámpago a sucursales bancarias, restaurantes de comida rápida, gasolineras y grandes superficies comerciales. Para ello utilizaban vehículos de gran cilindrada también robados. Sus blancos preferidos eran Alcalá de Henares y Alcorcón. También dieron golpes en Leganés, Fuenlabrada, Móstoles, Daganzo de Arriba y Villaviciosa de Odón.
Eusebio vivió desde 2006 en clandestinidad. Se identificaba normalmente como uno de sus hermanos y extremaba las precauciones para evitar ser arrestado.
En esta ocasión la estrategia no le sirvió. Los policías le reconocieron y le solicitaron que se identificase. El sospechoso les ofreció un nombre falso, pero los agentes comprobaron su identidad y consiguieron desbaratar el engaño.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 6 de septiembre de 2009