Un trabajador de 36 años falleció ayer en la empresa Servicio de Corte Producto Laminado (Secor), una pequeña factoría ubicada en el barrio Matiena de Abadiño (Vizcaya), al quedar atrapado por una bobina que lo ha aplastado, según informó Comisiones Obreras de Euskadi.
Los hechos ocurrieron al mediodía de ayer en la empresa que tiene una plantilla de nueve trabajadores. El fallecido, Antonio P.I., casado y con un hijo de corta edad acumulaba una antigüedad de tres años en la empresa.
Al parecer, la víctima sufrió un enganchón y la máquina le arrastró hasta provocarle la muerte. Un compañero, alertado por el ruido, activó la parada automática del tren de bobinado, pero la presión de las bobinas ya le había provocado la muerte.
El tren de bobinado es una máquina con dos ejes que sirve para desenrollar chapa de una bobina y volver a enrollarla en otra, de tal forma que, en el tránsito del material, los operarios comprueban su calidad, informa Vasco Press. La máquina, según el sindicato, carecía de detectores de presencia y de un sistema de parada automática para casos de riesgo.
El trágico suceso ha causado una profunda conmoción entre sus compañeros. CC OO, que ostenta la representación sindical en Secor, ha convocado una concentración de repulsa que probablemente tendrá lugar este próximo viernes a las 12.30 horas en Matiena.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 10 de septiembre de 2009