La conselleira do Mar, Rosa Quintana, se ofreció ayer como "aliada" de la acuicultura en el marco de la World Fishing, después de escuchar las quejas de los cultivadores contra la Xunta. Pablo García, presidente de la Asociación de Productores de Cultivos Marinos (Apromar), denunció que la acuicultura está "en la parte baja de la ola" y que no se recuerda un momento de tanta "debilidad". Según él, Galicia es el ejemplo extremo de la paralización que azota a la industria acuícola europea y española. Pese a la "mano tendida" de la conselleira, "no es tan evidente que se puedan acometer iniciativas empresariales nuevas". "Lo difícil es la viabilidad administrativa", que apaga el interés de los inversores, advirtió García.
La acuicultura ha crecido poco en comparación con el esfuerzo en desarrollo, lamentan los productores. Sólo se ha aprobado un nuevo emplazamiento pese a la veintena de propuestas que están sobre la mesa desde hace cinco años. "No existen garantías" respecto a la viabilidad administrativa. El sector acuícola lanzó ayer esta llamada de atención a la Xunta durante la inauguración de la IV Conferencia Sectorial de Apromar. Junto a García, Quintana no pudo más que insistir en el "interés" por que Galicia recupere su pujanza. "Nunca se debiera haber abandonado" a la industria acuícola, dijo en alusión al bipartito.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 18 de septiembre de 2009