Hay informaciones que desgraciadamente no encuentran la portada de los noticieros. Una de ellas es la del Programa Mundial de Alimentos (WPF) de la ONU, que ha manifestado que el número de hambrientos en el mundo superará este año los 1.000 millones, aunque distintas ONG ya hablan de 3.000 millones de personas desnutridas. Y mientras, los Estados del mal llamado Primer Mundo reducen por la crisis económica los presupuestos para solidaridad de aquellos invisibles a los que la tragedia de la falta de lo más esencial les resulta desde siempre demasiado eterna.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 23 de septiembre de 2009