En Ponteareas construyeron un instituto de enseñanza media para que empezara a funcionar este curso, pero el gobierno local se "olvidó" de que necesitaba un vial de acceso, además de conexión a las redes de saneamiento y eléctrica. El edificio no puede ser estrenado y los padres de los alumnos (225, de Ponteareas y Covelo), que no fueron prevenidos de la situación hasta el pasado lunes, se han pasado la semana a manifestación diaria pidiendo a la Consellería de Educación una solución que no acaba de llegar "por la desidia del Ayuntamiento", dice Ovidio Álvarez, presidente del ANPA.
El nuevo instituto, en la parroquia de Barral, se comprometió hace cuatro años después de una movilización por la masificación que padecían los dos institutos que había en el municipio. En la tramitación del proyecto, el gobierno local eligió para construirlo unos terrenos rústicos de propiedad privada con cuyos propietarios firmó un convenio que le comprometía a recalificarlos en el plan general de urbanismo. Pero este plan aún no ha sido aprobado, y el convenio decayó. Aunque los propietarios de los terrenos cedieron el paso a las máquinas durante la construcción del edificio, ahora lo niegan, por cuanto no se han cumplido los compromisos de recalificar el entorno. El Ayuntamiento aprobó el miércoles por unanimidad pedir la expropiación urgente del vial, pero la tramitación requerirá dos o tres meses.
Mientras, la Consellería de Educación ha propuesto a los padres una jornada escolar de tarde en otro de los institutos, a partir de las 15.30. Los padres no lo aceptan porque descabala la organización doméstica, los alumnos perderían 40 horas lectivas al mes y haría que cada día llegaran a casa sobre las 10 de la noche, con la imposibilidad de hacer "los deberes" y las actividades extraescolares. "Nos estuvieron engañando hasta el final, diciéndonos que el instituto iba a funcionar", asegura Álvarez. Hoy mantendrán una reunión que tuvieron que forzar con el delegado de Educación de Pontevedra en busca de soluciones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 25 de septiembre de 2009