El propietario de la cordelería J. J. Chicolino, Juan José Fajardo, se emocionó ayer al recordar las muestras de apoyo que recibió desde el espectacular incendio que arrasó sus instalaciones en Boiro. Visitado ayer por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y rodeado por familiares y trabajadores, declaró que a pesar de las pérdidas no va a despedir a nadie. Dijo que su pasión por el mundo de las redes le va a ayudar para "continuar con el negocio" e, incluso, a "aumentar la plantilla" cuando la situación de estabilice.
"Son treinta años de mi vida los que se fueron muy rápido, pero esto es todo para mí y me moriré siendo empresario", expresó a Europa Press. "Me llamaron clientes para ofrecerme dinero y proveedores me ofrecieron maquinaria sin fecha de pago", reveló. Lo más importante para él es que "no hubo que lamentar ninguna desgracia" más allá de pérdidas materiales.
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de septiembre de 2009