Con pocas palabras se puede explicar la crisis. Ni economistas laureados, ni magos financieros, ni banqueros éticamente insolventes, ni políticos incalificables lo han hecho.
Fue un poeta quien dio con la esencia de esta crisis que todos dicen es de confianza. Confianza, valor intangible, materializado en déficit de todo. De lo abstracto a lo concreto y real en un ejercicio parecido al que la poesía hace dando palabras al sentir.
Palabras para esta crisis son las del poeta de los buitres de anchas alas que hoy desesperan de hambre en campos de Castilla, Aragón o Navarra. Fue Antonio Machado quien dijo: "Es de necios confundir valor y precio". ¡Eureka!, crisis entendida.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de septiembre de 2009