Marruecos fue decisivo para que el secretariado de la Unión por el Mediterráneo (UpM) recayera en Barcelona frente a las candidaturas de otras ciudades. Con esa realidad y con el propósito de estrechar las relaciones políticas entre ese país norteafricano y Barcelona, el alcalde de la ciudad, Jordi Hereu, inicia un viaje a varias ciudades marroquíes. "Nos interesa fortalecer las relaciones políticas, culturales y comerciales con ese país", señaló ayer el alcalde.
Entre las autoridades con las que se entrevistará figura el primer ministro, Abbas el Fassi; el titular de la cartera de Exteriores, Fasi Fihri, y el ministro responsable de la comunidad marroquí en el extranjero, Mohammed Ameur. La visita del alcalde, que tiene rango de visita de Estado, incluye encuentros con los presidentes de las Cámara de los Diputados y del Senado.
La sede de la UpM se decidió a finales del año pasado y desde entonces se está reformando el Palau de Pedralbes, que será donde se ubicará el secretariado. No hay certeza de cuándo empezará a funcionar el órgano de expertos y técnicos que definirá las prioridades de las políticas que se desarrollarán.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 20 de octubre de 2009