Los precios de la industria han experimentado en septiembre su novena caída consecutiva. El índice de precios industriales que publica mensualmente el Instituto Nacional de Estadística (INE) refleja un retroceso del 5,4% respecto a septiembre de 2008. Con ser elevado, es una décima inferior al de agosto, lo que puede indicar que el desplome está tocando suelo.
Los precios a los que la industria vende sus productos comenzaron a caer en enero de este año, con tasas que fueron aumentando hasta julio, que marcó el máximo de la serie (un 6,7%), que arranca en 1975. A partir de agosto, el descenso comenzó a moderarse.
Las actividades ligadas a la energía son las que registran los mayores retrocesos (un 11,5% interanual), debido en gran medida a la depreciación del petróleo, aunque en el último año no ha sido tan acusada. Por ese motivo, la tasa negativa de septiembre es ya idéntica a la de agosto. Las coquerías y el refino de crudo, seguidas del suministro de energía eléctrica y gas y de la industria química, son las actividades que más han influido en la caída de los precios industriales en septiembre.
El segundo grupo de bienes que más han abaratado sus precios son los intermedios, es decir, los que aún necesitan otros procesos industriales para convertirse en producto final. Éstos caen un 7,4%.
Frente a esas cifras, los bienes de consumo están ya más próximos a la estabilización, con tasas que se reducen al 0,7% de caída. Los únicos que no han llegado a depreciarse en ningún momento son los bienes de equipo, indicativos de la voluntad inversora de las empresas, aunque registran un mínimo avance del 0,3%.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 27 de octubre de 2009