La economía andaluza parece ofrecer los primeros síntomas de mejoría, o al menos, las primeras noticias de que la gravedad de la crisis toca fondo. La evolución real del PIB de Andalucía, referida al segundo trimestre, cifra un descenso del 4% interanual, según la Contabilidad Trimestral de Andalucía que elabora el Instituto de Estadística de Andalucía (IEA), inferior a la media nacional (-4,2%) y, sobre todo, de la Eurozona (-4,8%). En términos intertrimestrales, el ritmo de caída de la actividad se modera ligeramente, siendo la reducción del PIB de Andalucía del 0,9% en el segundo trimestre, frente al -1,2% del primer trimestre del año.
El último número de la Revista de Coyuntura Económica de Andalucía, que ayer publicó la Junta, señala que "desde la óptica de la oferta, todos los sectores han tenido crecimientos interanuales negativos en el segundo trimestre, especialmente intensos en construcción (-13,8%) e industria (-12,7%), si bien los indicadores más avanzados conocidos apuntan una moderación del ajuste en ambos sectores".
Por su parte, la reducción global del PIB ha venido determinada desde la óptica de la demanda por la contribución negativa de los componentes internos, consumo e inversión, que restan 7,1 puntos al crecimiento agregado, un punto más que entre abril y junio.
Restricción del crédito
Este descenso de la demanda regional se produce en un contexto de restricciones en las condiciones de financiación a familias y empresas, y se refleja en el saldo de los créditos concedidos al sector privado, que al finalizar el primer semestre presentan una reducción del 0,9% interanual en Andalucía, siendo la primera caída desde que se dispone de información (1984).
Por su parte, el sector exterior aumenta su contribución positiva, aportando 3,1 puntos al crecimiento global del PIB. Asimismo, la licitación oficial subió un 23,2% en el tercer trimestre y la ocupación hotelera redujo del 12,5% al 6,6% su caída respecto a la primera mitad del año.
Por último, las ventas del comercio minorista se reducen un 6,7% interanual en el tercer trimestre, frente al 8,3% de la primera mitad del año, y el índice de ventas en grandes superficies muestra un descenso, en términos nominales, del 8,5% interanual en los meses de julio y agosto (-10% en el primer semestre).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 3 de noviembre de 2009