Los líderes de CC OO y UGT de Cataluña, Joan Carles Gallego y Josep Maria Álvarez, respectivamente, consideran que el recorte de 1.800 empleos planteado en la fusión de las cajas Catalunya, Manresa y Tarragona es "inaceptable", y señalan las prejubilaciones como fórmula para rebajar la actual plantilla en torno al 20%.
Gallego indicó que el solapamiento de oficinas entre entidades, debido a la presencia en todo el territorio de Caixa Catalunya, supone una reestructuración de la plantilla, pero el sindicato sólo aceptará "prejubilaciones, no despidos".
Álvarez también mostró su rechazo a los despidos y abogó por las prejubilaciones para el total de los 1.800 empleados, el 20% de la plantilla. Fuentes de Presidencia consideraron que la cifra de 1.800 es de "máximos" y lo consideran una estrategia negociadora.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 12 de noviembre de 2009