El grupo independentista radical Maulets reivindicó ayer el "ataque a la sede" de Provida en Valencia que consistió en pintar en la persiana metálica de esta entidad el lema Negar el dret al pròpi cos es violència de gènere. La misma frase, escrita en una pancarta, la colgaron en la verja de acceso a la puerta barroca de la catedral de Valencia.
Estos hechos se produjeron después de la conmemoración del Día Internacional contra la Violencia de Género, el pasado miércoles, en contra del proyecto de ley que permitirá el aborto libre hasta las 14 semanas de embarazo por considerarlo "insuficiente" y contra "la derecha más reaccionaria y católica".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 27 de noviembre de 2009