El partido aún no tiene nombre pero ya tiene canción: se titulará Majestic, en honor del hotel que ha alojado dos actos clave en la carrera de la ex diputada del Partido Popular Monserrat Nebrera. El primero fue hace dos años cuando organizó una reunión, díscola con la dirección, y el segundo lo celebró ayer para iniciar su nueva etapa. Ante 500 simpatizantes, Nebrera presentó las ideas de su proyecto liberal-conservador con el que pretende concurrir a las autonómicas. "¡Volveremos al Parlament y seremos la gran sorpresa de España y Cataluña en 30 años!", exclamó.
Ante un auditorio expectante, formado por simpatizantes del PP, de Ciutadans y alguno de Unió, Nebrera emplazó a los asistentes a una reunión dentro de tres meses. "En realidad, esto es sólo una cita", dijo. "En ese tiempo tenemos que ser capaces de crear un programa político". La catedrática de Derecho habló tras un panel con el lema Cataluña, la segunda transición, escrito en las cuatro lenguas del Estado para dar fe de su ambición de extender su proyecto a toda España.
Nebrera opinó que el sistema está agotado porque los políticos son rehenes de los partidos y, a veces, de los sueldos. "No puede ser que alguien siga en política por la hipoteca", dijo para asegurar que propugna una revolución de las personas y conciencias. "Es un cambio de paradigma", resumió. "Y no se puede hacer desde dentro, sólo desde fuera".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 2 de diciembre de 2009