El intento de consenso en materia de empleo que ayer planteó José Luis Rodríguez Zapatero en la cuarta Conferencia de Presidentes autonómicos que se celebró en el Senado acabó con una colosal bronca política. Hasta el punto de que el presidente del Gobierno, en un tono especialmente duro y áspero, acusó sin matices a los jefes regionales del PP de "lavarse las manos" en la lucha contra el paro. "Es lamentable que por un interés partidista no se tenga la visión de defensa del interés nacional y no se dé el respaldo a un documento que integraba el 80% de las propuestas del PP. Hace falta más lealtad y madurez institucional con España", declaró.
En las negociaciones en busca de un pacto frente a la crisis y el paro, Zapatero anunció que estaba dispuesto a no levantarse de la reunión sin un acuerdo. Le contestó la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre: "No quiero corresponsabilizarme de las políticas económicas de Zapatero, que se ha convertido en el campeón del paro".
MÁS INFORMACIÓN
En la votación, las comunidades del Partido Popular se abstuvieron, lo que, según las normas que regulan este órgano, hacía inviable la aprobación del acuerdo.
Páginas 10 a 12
Editorial en la página 24
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 15 de diciembre de 2009