Hacia las 21.00 del lunes, Matíes, de 86 años, golpeó presuntamente a su esposa, Mercedes, de 80, hasta matarla con el bastón que ella usaba para apoyarse. Luego, este vecino de Catadau (Valencia) -que según testimonios de su entorno daba muestras de un extraño comportamiento en los últimos días- permaneció frente al televisor unas cuatro horas hasta que decidió comunicar lo que había hecho a su hijo, quien, de inmediato, notificó el suceso a la Guardia Civil.
El crimen eleva a 52 el número de mujeres muertas por violencia machista en lo que va de año, según los datos del Ministerio de Igualdad.
Este carnicero jubilado informó del asesinato a su hijo, que vive cerca de él, hacia la una de la mañana, según varios vecinos. El presunto homicida no opuso resistencia y fue trasladado por los agentes hasta el cuartel donde ayer pasó ayer todo el día prestando declaración. Todo parece indicar que hoy pasará a disposición de los juzgados de Carlet.
El matrimonio es muy conocido en el pueblo ya que durante muchos años regentaron una céntrica carnicería, próxima al Ayuntamiento, situada en la planta baja de la vivienda.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 16 de diciembre de 2009