Por primera vez, los Presupuestos de la Generalitat Valenciana son inferiores a la deuda acumulada por la Administración autonómica. El proyecto, aprobado a última hora de la tarde de ayer con la presencia fugaz del presidente del Consell, Francisco Camps, que sólo acudió al hemiciclo a la hora de votar y se marchó sin esperar a las explicaciones de voto, prevé un gasto de 14.393 millones de euros, lo que supone un incremento de sólo el 0,7% en relación con el de 2009.
El fuerte endeudamiento, que obliga a un saneamiento de las cuentas públicas por segunda vez, y la incapacidad del Consell para hacer frente a numerosos pagos fueron dos de los ejes de crítica de la oposición, que no ha visto recogidas por el PP, salvo en cuestiones muy puntuales, las más de 2.300 enmiendas presentadas. Los populares, por su parte, argumentaron que los presupuestos atienden las necesidades sociales ante la crisis y facilitan la reactivación, gracias a una bajada de impuestos en los tramos autonómicos. De hecho, fruto de la crisis y de la reducción, los impuestos directos bajan un 17% y los indirectos un 16%. La caída en el tramo autonómico del IVA es de 800 millones y la del IRPF de 500 millones.
Camps acudió a votar y se fue sin esperar la explicación de voto
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El portavoz del Grupo Popular y consejero de Solidaridad y Ciudadanía, Rafael Blasco, incidió a la hora de explicar el voto en los ataques al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, responsable, en su opinión, de la situación de crisis, y arremetió contra los grupos de la oposición por su "demagogia, infamia y calumnia que no responden a las aspiraciones del pueblo valenciano".
También la financiación autonómica ha marcado los debates del presupuesto. El PP criticó la supuesta discriminación en este terreno por parte de la Administración central mientras los grupos de izquierda recriminaban al PP su "victimismo".
La portavoz socialista, Cristina Moreno, tachó anoche de "insuficientes" las cuentas para 2010 y señaló que, gracias al nuevo sistema de financiación autonómica, aprobado el jueves en el Congreso, "vamos a poder hacer algo frente a un presupuesto pobre y endeudado". El síndic del PSPV-PSOE, Ángel Luna, a su vez, declaró que "el debate de los presupuestos es un debate raro porque no existe. No hay más que asistir al hemiciclo y darse cuenta de cómo el Consell pasa olímpicamente".
La portavoz de Economía de Compromís pel País Valencià, Mireia Mollà, criticó la "falta de coherencia" del PP en el actual contexto económico, ya que "obvia" unas cifras de paro "más graves" que en otras autonomías.
El diputado de Esquerra Unida, Lluís Torró destacó que las cuentas "no responden" a una situación de crisis y de paro, en la que la Comunidad Valenciana "es campeona de España y de Europa",
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 19 de diciembre de 2009