El plan municipal de peatonalización de Sevilla dio ayer un paso más en la ciudad. La trianera calle de San Jacinto se cortó ayer por primera vez al paso de vehículos y se limitó su uso para peatones y ciclistas.
Grandes maceteros, señales y policías reorganizaban ayer el tráfico ante el nuevo diseño de las calles. Los vecinos del barrio de la Plataforma Trianera, que han protestado durante meses en contra de la peatonalización de la zona, se quejaron ayer ante el "caos circulatorio" del primer día, según hizo saber su portavoz Ángel Bautista. "Los vecinos están despistados ante un desconocimiento total del tráfico como consecuencia del cambio de sentido de cinco calles", informó a Europa Press.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 20 de diciembre de 2009