En el seno de la Cofradía Sant Roque existe la fundada sospecha de que si Juan José Ibarretxe no figurara entre sus miembros, ni el Ararteko, primero, ni la Defensoría de la Igualdad se hubieran fijado con tanta insistencia en la ausencia de la mujer en la tradicional cita gastronómica de agosto en esta localidad alavesa.
Y es que la presencia del entonces lehendakari -adujo motivos personales este verano para no acudir a la comida- ha servido durante los dos últimos años como caja de resonancia para quienes exigen que la Cofradía "se adecúe a los nuevos tiempos" y cambie su actual reglamentación. Sin embargo, hasta ahora no se ha registrado la petición formal de ninguna mujer para acceder a la mesa, aunque la entidad sí dispone de socias.
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Eso sí, con el paso del tiempo la tensión a nivel social generada por esta polémica se ha reducido y ahora recobrará vigencia a partir de la convocatoria de las asambleas informativas para debatir el informe De Ángel.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 28 de diciembre de 2009