La circulación de la autovía Santiago-Ourense (AG-53) que el domingo quedó afectada por un desprendimiento de piedras y tierra en el kilómetro 84,5, a la altura del municipio orensano de Puxín, quedó restablecida en la tarde de ayer.
Los técnicos de la Dirección Xeral de Infraestructuras de la Xunta trabajaron en las labores de desescombro para que la autovía estuviera a pleno funcionamiento a mediados de la tarde. Otro desprendimiento de tierra y piedras afectó desde primera mañana de ayer a un carril de la carretera que une Monforte y Lalín, a su paso por O Saviñao (Lugo).
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 5 de enero de 2010