Tengo un amigo controlador aéreo y no cobra ni mucho menos esos 300.000 euros anuales que asegura José Blanco, ministro de Fomento. La cifra real se sitúa en una tercera parte del mencionado número, más o menos.
También es falso decir que se podrán ofrecer billetes de avión más baratos a los pasajeros si se consigue que el sueldo de los controladores baje. Las compañías aéreas son privadas y son las que fijan las tarifas para que los usuarios puedan volar. El sueldo de los controladores lo paga AENA, un ente público que depende precisamente del Ministerio de Fomento. Es decir, nada que ver una cosa con otra.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 9 de enero de 2010