Una caída de tensión eléctrica en la línea de alta velocidad entre Madrid, Toledo, Sevilla y Málaga afectó ayer a 17 trenes, a unos 2.500 viajeros y originó retrasos de dos horas y media. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) informó de que la avería en el suministro eléctrico entre Los Gavilanes y Yeles (Toledo), produjo el desprendimiento de la catenaria en la vía dos a las 7.10 de la mañana y quedó resuelta a las 11.15 horas. En el momento de la avería se encontraban circulando cuatro trenes con origen en Madrid y destinos a Sevilla, Málaga, Toledo y Ciudad Real-Puertollano.
A las 9.30 horas se reinició la circulación en el tramo afectado, aunque con la limitación a una vía única en un trayecto de 35 kilómetros. Adif, que ha abierto una investigación, transportó a los viajeros en autobuses. La compañía ferroviaria anunció que mantiene su compromiso de puntualidad, por lo que devolverá el importe del billete a los clientes que llegaron con retraso a su destino.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Viernes, 15 de enero de 2010