La internacionalización del Grupo Puentes ha llevado a la compañía compostelana a estar presente con oficinas en países como Libia o Rumanía, y haber acudido a concursos de obra en Namibia o México. Juan Loureda, su vicepresidente, explica que "en cierta medida es una salida natural", y pone como ejemplo la incursión del grupo en Kazajstán país en el que se introdujeron a través de un socio local inicialmente.
Si grandes grupos como San José desarrollan proyectos inmobiliarios en países como Cabo Verde, otras compañías, de mucho menor tamaño, han optado también por la internacionalización con operaciones puntuales. Espina y Delfín, especializada en obras hidráulicas, está presente en países como Uruguay, y también suministra tecnología a mercados árabes como Irak. Otras firmas modestas como la orensana Tuconsa llevan años operando en Nicaragua, mientras que Fergo Galicia ha optado por Suráfrica para realizar sus pinitos en el exterior.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 18 de enero de 2010