Los sindicatos de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana inician hoy movilizaciones contra la privatización de nuevos servicios de la empresa pública. La protesta se dirige contra la fórmula de financiación público-privada ideada por la Generalitat para poder terminar la línea 2 de Metrovalencia, que conectará el barrio de Torrefiel, al norte, con el de Natzaret, combinando tramos subterráneos con otros de tranvía y cruzando el casco histórico de Valencia.
"No existe ninguna razón económica que justifique la privatización de la línea", afirmó CC OO, ya que la explotación del servicio se realizará "sin riesgo ninguno" dada la compensación de 99 millones de euros prevista en el modelo de gestión, al que Comisiones ha presentado alegaciones. Intersindical Valenciana auguró tarifas desorbitadas, caída de la calidad del servicio y problemas de seguridad. La Consejería de Infraestructuras aseguró que será ella la que marque los precios y que se aplicarán los criterios de seguridad habituales.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 26 de enero de 2010