La guerra en el seno del PP, entre zaplanistas y campistas, lejos de amainar aumenta y se intensifica en la provincia de Alicante. Si hace un par de semanas el gobierno de Villena saltaba por los aires al pasar cinco concejales campistas a la oposición, ayer el alcalde de Torrevieja, Pedro Ángel Hernández Mateo, del PP y afín a Camps, confirmó la suspensión cautelar de militancia del concejal y vicepresidente de la Diputación, Domingo Soler. El castigo al edil zaplanista se basa en 55 supuestas faltas muy graves, entre ellas el "boicoteo" y las "críticas" al PP.
Soler restó importancia al asunto ya que aseguró que ni él ni la dirección provincial han recibido notificación oficial alguna, y que debe ser la dirección nacional del PP de Madrid la que se lo comunique para poder alegar. El vicepresidente de la Diputación aclaró que sus críticas son "contra el presidente local del PP, por su gestión, y no contra el alcalde". Soler, que opta a dirigir el PP en Torrevieja enfrentándose al alcalde, prefiere "aparcar los litigios y que las urnas decidan el futuro".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 10 de febrero de 2010