Niño y Pistola continúan su búsqueda del pop perfecto. Ahora lo hacen transmutados en Arthur and the writers y, tras su desastrosa experiencia con la discográfica asturiana Astro, virados hacia la autogestión. "El disco está formulado de manera diferente a los anteriores: hay una guitarra eléctrica en todas las canciones", se explica Manuel Portolés, Manolito, compositor y voz de la banda. Esta noche ponen de largo su tercer elepé, Niño y Pistola as Arthur and the writers, en la Sala Nasa de Santiago, a las nueve de la noche.
Además de la progresiva electrificación de su sonido, de origen acústico en su debut -Como un maldito guisante, 2006-, las músicas de los del Val Miñor, al sur de Vigo, han cambiado de orilla del océano. "Nos desplazamos hacia lo americano, The Band, la Creedence, el Dylan eléctrico o Neil Young", relata Manolito, "aunque siguen diciendo que sonamos británicos". Este envoltorio sonoro se encuentra al servicio de la historia del poeta Arthur, en diez temas al estilo "Sgt. Peppers o Ziggy Stardust, con una banda paralela de biografía inventada por el escritor Arturo Enríquez". "La idea de cambio de vida une las letras del disco", expone.
Niño y Pistola grabaron As Arthur and the writers en los estudios de Segundo Grandío, en Gondomar. Ernie Records lo colocará en las tiendas. "Con Culebra [su segunda grabación] Astro tiró el disco a la basura". De momento, la buena recepción que Arthur... ha obtenido en Radio 3 ayuda a espantar fantasmas.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 11 de febrero de 2010