Justo un mes después del terremoto, miles de haitianos se concentraron ayer en el centro de Puerto Príncipe, cerca de las ruinas de la catedral. Juntos rezaron en memoria de las más de 200.000 personas que murieron tras el seísmo que a las cinco de la tarde del pasado 12 de enero arrasó la capital del país. En apenas un minuto, un millón de haitianos perdieron su hogar.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 13 de febrero de 2010