Después del intenso cruce de propuestas entre la Consellería de Medio Ambiente y el Ayuntamiento para ejecutar la nueva depuradora de Vigo, ayer volvió a estancarse la situación. El Ayuntamiento no ha recibido ninguna nueva propuesta formal de la consellería ni ésta respondió a la del alcalde, Abel Caballero, que reclamó a la Xunta 10 millones más de los que el conselleiro Agustín Hernández señaló disponibles. El PSdeG le acusó de querer "escaquearse" de pagar lo comprometido por la Xunta bipartita.
En el presupuesto total de la obra, 234 millones de euros, el borrador del convenio redactado en 2008 atribuye a la Xunta una aportación de 107 millones. Hernández, con la mediación de Caballero, consiguió que el Ministerio de Medio Ambiente aceptara adelantar esa aportación autonómica, que la Xunta comenzaría a pagar dentro de cinco años y que, al momento de su liquidación, por la suma de intereses, se habrá elevado a 126 millones. El Ayuntamiento, por su parte, se obligó en aquel borrador a aportar unos 18 millones de euros, que incluyen el valor de los terrenos y 5,2 millones de acometida eléctrica.
El PSdeG acusa a Hernández y Feijóo de "gobernar contra Vigo"
Caballero, según formuló a hace unos meses, sólo aceptaría pagar la acometida eléctrica si la Consellería de Medio Ambiente realiza unas inversiones equivalentes en la ciudad, opción que Hernández descartó y que empujó al alcalde a limitar la aportación municipal a los terrenos, en consonancia con las pautas adoptadas por la Xunta en otras ciudades.
En esta disposición, bloqueadas, estaban las negociaciones, cuando el domingo Hernández anunció en la prensa su disposición a aceptar que Vigo sólo aportara los terrenos con dos condiciones: que cediera a la Xunta la gestión municipal de la planta y que se transfiriera la ejecución del proyecto desde la empresa estatal Aquanorte a Augas de Galicia. Caballero dio la vuelta a la propuesta y reclamó la transferencia de las competencias autonómicas en la construcción de la planta con los fondos pertinentes, que cifró en 136 millones. Hernández aceptó trasferir la competencia, pero limitó los fondos a 126 millones y ahí, por el momento, se detuvo el avance, que más parece ruidosa escaramuza.
La secretaria de Medio Ambiente del PSdeG, Carmen Gallego, afirmó ayer que Hernández, "avergüenza a la política gallega" por sus "excusas" y único interés en "montar lío para no pagar". Le acusó, a él y al presidente de la Xunta, Núñez Feijóo, de "gobernar contra Vigo".
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 18 de febrero de 2010