El concurso del suelo de la empresa municipal Mercasevilla elevó la puntuación a la promotora ganadora, Sando, porque ofrecía pagar 3,4 millones al contado, aunque en realidad se trataba de una cantidad "puesta a disposición" de la vendedora cuando fuese requerida, según aclaró ayer el técnico Juan Antonio Ripollés. La juez del caso considera que la venta a Sando supuso una "adjudicación fraudulenta" de los terrenos, ya que su oferta de 3,4 millones era "antieconómica" frente a los 30 millones al contado que ofrecía la constructora Noga.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de febrero de 2010