María del Mar Bermúdez y Francisco Palo, los padres de Sandra Palo, asesinada tras ser secuestrada y violada en 2003, pidieron ayer, en una manifestación celebrada en la capital, la reforma inmediata de la Ley del Menor y que los delincuentes cumplan íntegras las condenas. Esta petición se refería de forma especial a Rafael Fernández García, El Rafita, que tenía 14 años cuando participó en el asesinato de Sandra Palo. Éste se encuentra ahora en libertad vigilada. A la protesta acudieron familiares de la joven Marta del Castillo, asesinada en Sevilla en 2009.
La concentración, en la que participaron centenares de personas, comenzó a las cinco de la tarde en la plaza Mayor y terminó en la Puerta del Sol.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Domingo, 28 de febrero de 2010