ETA ha pasado los "dos peores meses de su historia" y los dos peores años que se recuerdan. Ayer perdió a su máximo responsable, el jefe militar, Ibon Gogeaskoetxea (en la foto), y a uno de sus pistoleros más peligrosos, Beinat Aginagalde, acusado de matar al edil socialista Isaías Carrasco y al empresario Inaxio Uria. La quinta decapitación de la cúpula etarra en dos años llega tras desbaratarse su nueva base en Portugal, el frustrado intento de instalarse en Cataluña y la caída del etarra que dirigía tres comandos en Euskadi. Los detenidos ayer en Cahan (Normandía) preparaban un secuestro en España, explicaron fuentes de Interior.
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Editorial en la página 28
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* Este artículo apareció en la edición impresa del Lunes, 1 de marzo de 2010