Nueve detenidos y 175,5 kilogramos de cocaína ocultos en palés de madera. Es el resultado del operativo que la Guardia Civil cerró este fin de semana en Sevilla y que ha permitido desarticular una red internacional de tráfico de drogas. La Operación Calentito -llamada así por el "calentón" que sufrió uno de los vehículos policiales durante un seguimiento- arrancó a mediados del año pasado. Las investigaciones se centraron al principio en un restaurante especializado en arroces ubicado en el barrio de Sevilla Este, en la capital andaluza. Según la Guardia Civil, en este local era donde se cortaba la droga. El negocio también se utilizaba supuestamente para blanquear parte de los beneficios del entramado. El dueño del restaurante, P. C. P, es uno de los detenidos y tenía previsto inaugurar este fin de semana una cervecería también en Sevilla Este.
Los agentes averiguaron que la red tenía pensado introducir un contenedor con la droga por el puerto de Algeciras (Cádiz) desde Paraguay. El viernes detectaron que el envío se había puesto en marcha. Y localizaron la nave industrial en el polígono de la Espaldilla, en Alcalá de Guadaíra, que se utilizaría para guardar la droga.
Entre los nueves detenidos está el cabecilla, un ciudadano con las nacionalidades italiana y argentina. También fueron arrestados tres ciudadanos paraguayos, que habían acudido a España, según fuentes de la investigación, para cerciorarse de que la cocaína llegaba a su destino. Entre estos últimos figura un cirujano paraguayo especializado en obstetricia. "Para ganarme un extra". Fue la respuesta que dio este médico cuando los agentes le preguntaron por qué había entrado en el negocio del narcotráfico.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 9 de marzo de 2010