El juez Baltasar Garzón se adhirió ayer al recurso de súplica del Ministerio Fiscal contra la admisión a trámite de la querella por las escuchas de los imputados de la trama Gürtel, y acusó al abogado querellante, Ignacio Peláez, de haber incurrido en "groseras inexactitudes que desvirtúan notablemente la realidad de lo sucedido".
El defensor de Garzón, Gonzalo Martínez-Fresneda, se adhiere "íntegramente" al recurso de la Fiscalía y en especial al extenso alegato contrario a la "inmunidad absoluta" de las conversaciones entre los presos y sus abogados.
El defensor de Garzón insiste en que las comunicaciones de los internos sólo se pueden intervenir por orden judicial, "pero no sólo en casos de terrorismo", -como sostiene el querellante- "sino en todos aquellos casos en que haya motivos para ello por estar comprometido el descubrimiento de un delito". El letrado cita en su apoyo sentencias del propio Tribunal Supremo y del Constitucional.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 17 de marzo de 2010