La toma de posesión, ayer, de los nuevos consejeros, Javier Fernández-Lasquetty -hasta ahora responsable de Inmigración, que pasa a ocuparse de Sanidad en lugar de Juan José Güemes, que dimitió la semana pasada del cargo- y de Paloma Adrados -que asume junto a sus responsabilidades de Mujer y Empleo la cartera de Inmigración-, fue una cita multitudinaria, pese a que se trataba de consejeros ya en ejercicio.
A poco más de un año de las elecciones autonómicas, la Real Casa de Correos, la sede del Gobierno regional, se llenó de altos cargos y representantes de asociaciones. Era la cita para lucir adhesiones.
Fuera de la expectación, fue un acto previsible: Lasquetty y Adrados juraron cumplir sus responsabilidades y se hartaron de estrechar manos y de besar.
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Güemes no se separó de la presidenta, Esperanza Aguirre, y se negó a hacer declaraciones: "Ya no soy político", zanjó.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 23 de marzo de 2010