El Pleno del Senado rechazó ayer dos veces la subida del IVA que será efectiva a partir de julio y pidió al Gobierno que la suspenda. Aunque lo hizo por mayorías distintas según de quién fuera la idea. En una moción propuesta por el PP, la idea contó con el apoyo de CiU, UPN y el BNG y ganó por cuatro votos. En otra moción, propuesta por el BNG, fue aprobada con 19 votos de diferencia y dejó a los socialistas prácticamente aislados en defensa de la subida fiscal.
La diferencia estaba en la "mala fe" o en la "buena fe" de la propuesta, según la expresión que utilizó ayer el portavoz de ERC, Carles Bonet. Su partido, ICV e IU votaron en contra de la moción del PP (en abierta contradicción con lo que hicieron en el Congreso hace sólo una semana) y a favor de la otra, que pedía lo mismo. Estos partidos entendieron que la argumentación ideológica del PP y de BNG es diferente a la hora de oponerse a la subida de impuestos.
Otro factor para la diferencia de mayorías fue que el PP llevara al Senado una moción que ya había perdido en el Congreso, una práctica que los socialistas suelen denunciar como revanchismo parlamentario. Las mociones del Senado (equivalente a las proposiciones no de ley del Congreso) son trasladadas al Gobierno y tienen gran significado político, pero nula fuerza legal.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de marzo de 2010