Los vizcaínos recibirán en las próximas semanas en sus domicilios más declaraciones de la renta confeccionadas que nunca. La Hacienda de Vizcaya las ha elevado hasta las 350.000 (100.000 más que en la campaña del pasado año), con lo que supondrán el 60% de las 610.000 que se espera recibir.
El plazo para cumplir las obligaciones tributarias será entre el 3 de mayo y el 30 de junio y en el primer día de la campaña, quienes no pongan objeciones a las declaraciones enviadas verán ingresado el dinero (se espera que sea en el 85% de los casos) o deberán pagar a la Hacienda.
La otra novedad es la eliminación del servicio Rentanet 48 horas, que permitía elaborar las declaraciones del IRPF en las oficinas de la Hacienda vizcaína con la ayuda de un técnico y recibir el dinero, en caso de devolución, en un plazo máximo de dos días. El pasado año utilizaron esta fórmula 28.0000 contribuyentes. El diputado foral vizcaíno de Hacienda, José María Iruarrizaga, explicó que será asimilado por el modelo de declaraciones enviadas a los hogares, ya que "suelen ser de tramitación sencilla".
De esta manera, el único medio gratuito para que las declaraciones sean cumplimentadas sera Rentanet 10 días, el de las entidades financieras, que devuelve y obliga a ingresar el dinero en poco más de una semana. La novedad de este año es que, al desparecer el Rentanet 48 horas, no es necesario ser cliente de la entidad para que se le tramite la declaración. Vizcaya espera también recibir 110.000 declaraciones por Internet (frente a las 84.000 del pasado año) y 50.000 manuales, cuando en 2008 alcanzaron las 100.000, apuntó Iruarrizaga.
El diputado foral anunció asimismo que los 55 liquidadores de la Hacienda que se dedicaban a Rentanet 48 horas pasarán a ocuparse de revisar las declaraciones confeccionadas que hayan sido impugnadas por los contribuyentes, los recursos que presenten contra el fisco y, como novedad, otra lucha contra el fraude: analizar en actividades económicas tanto en el IRPF como en el IVA.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 24 de marzo de 2010