Los cuatro policías que declararon ayer como testigos por el robo de 150 kilos de heroína y cocaína en una Comisaría de Sevilla afirmaron que el jefe de la Unidad contra la Droga y el Crimen Organizado (Udyco) custodiaba la llave del almacén, sólo la entregaba a un jefe y se entraba por parejas. También reconocieron que en esas dependencias no había luz y que las cámaras de seguridad dejaron de funcionar cuando se instalaron unas taquillas para los funcionarios.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 25 de marzo de 2010