Selecciona Edición
Selecciona Edición
Tamaño letra
Entrevista:ANTONIO ÁLVAREZ | Técnico del Sevilla | 32ª jornada de Liga | UN NOVATO PARA LA 'CHAMPIONS', UN VETERANO PARA LA PERMANENCIA

"He abierto la ventana y aireado el vestuario"

Uno lleva 30 años de ida y vuelta por los banquillos; el otro acaba de llegar. Ellos han cubierto los dos últimos despidos en la Liga. Antonio Álvarez, el novel, tiene objetivos de mayor altura: una final de Copa ante el Atlético y clasificar al Sevilla para la Champions. Javier Clemente intenta frenar la caída libre del Valladolid a Segunda. Hoy se enfrentan en Zorrilla

Antonio Álvarez Giráldez (Marchena, Sevilla; 1955) ha cumplido un sueño al ser designado entrenador del Sevilla. El no de Luis Aragonés le sonó a música celestial y hoy encara, ante el Valladolid, su cuarto partido con un balance previo de dos triunfos y una derrota. El único objetivo pasa por meter al Sevilla en la Liga de Campeones y ganar la Copa del Rey. Más allá, el futuro no existe.

Pregunta. ¿Respiró hondo cuando Luis Aragonés no aceptó la oferta del Sevilla tras la destitución de Manolo Jiménez?

Respuesta. Estaba convencido de que Luis Aragonés iba a decir que sí. Me hallaba en una oficina y me pusieron a entrenar de forma provisional. Ahora soy entrenador hasta el 30 de junio y después ya veremos.

"Mi relación con Jiménez es fría, pero no miro hacia atrás"

"Fui un emigrante en Alemania. Sé de dónde vengo. Soy un currante"

P. ¿No se sintió segundo plato?

R. No. Hay mucha gente con un ego alto que da importancia a eso. Soy un currante. Trabajo desde los 14 años. Estuve emigrado en Alemania y sé de dónde vengo. No me como el coco.

P. El club no le ha asegurado la continuidad en caso de ganar la Copa y lograr la clasificación para la Champions.

R. Así es, aunque el presidente, José María del Nido, cuando me presentó a los jugadores, afirmó que sería el entrenador hasta el 30 de junio y ojalá 25 años más. Pero firmé el contrato sin leerlo.

P. ¿Y eso?

R. Me dijeron 'firma aquí' y lo hice. Firmé en blanco porque mi ilusión era entrenar al Sevilla y no iba a poner ninguna condición.

P. ¿Cómo es su relación con Jiménez?

R. La verdad es que fría. Pasaron algunas cosas...

P. ¿Cuáles?

R. Él era el entrenador del filial y todo se enfrió a partir de ahí. Pero lo pasado es pasado. No voy a hablar mal de él.

P. Pues los jugadores sí que vienen rajando.

R. Deben hacer como yo, olvidar el pasado y no mirar atrás.

P. ¿Le hicieron los futbolistas la cama a Jiménez?

R. No lo creo. Lo que ocurrió es que el equipo entró en una dinámica perdedora y parecía que estaba desganado.

P. Ahora parece que hay más compromiso.

R. Creo que existía también antes. Lo que yo he hecho es abrir la ventana, airear el vestuario. Soy un tipo sencillo. Me gusta hablar con el jugador.

P. Se supone que tendrá una propuesta futbolística para el Sevilla.

R. Claro. Quiero un equipo alegre y ofensivo, equilibrado en la defensa y el ataque. Lo que pasa es que llegué para diez partidos y un estilo necesita cierto tiempo.

P. Si lograra los objetivos y no le renovasen el contrato, ¿se sentiría decepcionado?

R. Me sentiría orgulloso de haber conseguido un título. Soy consciente de que me estoy jugando mi futuro, pero de verdad que no pienso más allá del 30 de junio.

P. La afición le asocia a la época dorada de Juande Ramos, del que fue ayudante.

R. Por partes. Repetir lo que se hizo en esa etapa es muy difícil. No quiero que me encasillen con Juande. De él me llevé cosas, pero también aprendí muchas de Joaquín Caparrós. Como esa agresividad que metía al grupo, algo impresionante.

P. ¿Puede afectar a la entidad la delicada situación judicial por la que atraviesa Del Nido?

R. Me preocupa el presidente como persona. Está encima de los asuntos del club al ciento por ciento.

* Este artículo apareció en la edición impresa del Martes, 13 de abril de 2010