La organización internacional Oceana y el Colegio de Biólogos de Euskadi presentaron ayer una propuesta científica de creación de un corredor ecológico marino entre San Sebastián y Biarritz (Francia), que a lo largo de 35 kilómetros albergaría más de cien hábitats y un millón de especies.
El director de investigación de Oceana Europa, Ricardo Aguilar, y el decano del Colegio Oficial de Biólogos de Euskadi (COBE), Jon Ander Etxebarria, detalló en el auditorio del Aquarium donostiarra dicha iniciativa, que establece una franja de protección marítima de cinco millas desde la costa y cien metros de profundidad, con una ocupación total de 27.300 hectáreas.
El corredor ecológico vasco que plantean abarcaría en concreto la parte marina de los acantilados de Ulía y Jaizkibel, la desembocadura del Bidasoa y las bahías de Txingudi y Hondarribia, en el lado español, y la costa rocosa frente a Hendaya y Sokoa, y los acantilados que van de San Juan de Luz a Biarritz, en el francés.
El área a preservar daría lugar a uno de los corredores ecológicos más diversos e importantes del Atlántico europeo, según han asegurado, con 50 especies protegidas y 12 comunidades y hábitats de interés internacional. El director de Investigación de Oceana ha denunciado que el Cantábrico es una de las zonas europeas que menos áreas protegidas tiene.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 15 de abril de 2010