El primer cierre de administraciones de lotería de la historia se saldó ayer con el cierre de la mitad de establecimientos, según estimaron las organizaciones convocantes (ANAPAL, APLA y FENAPAL). Loterías y Apuestas del Estado (LAE) rebajó el porcentaje al 25%. El objetivo de la movilización -que puede no ser la última- fue evitar que los puntos mixtos (quioscos, librerías o estancos) puedan vender Lotería Nacional por terminal y cambiar del régimen administrativo al mercantil, tal y como prevé Hacienda y contemplan los presupuestos de 2010.
"Tememos que estos cambios puedan ser el preludio de un proceso de privatización que puede llevar a que sean multinacionales las que terminen llevando el peso del negocio", explica Jorge Martín, de ANAPAL. Este extremo ha sido reiteradamente negado por Loterías y Apuestas del Estado. Los loteros también se niegan a que los puntos mixtos vendan Lotería Nacional.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 22 de abril de 2010