Una celebración por los accidentes que pudieron ser y no fueron. Una compañía que evalúa los perjuicios de los siniestros laborales soltó ayer en la plaza de Felipe II, en el Día Internacional de la Salud y la Seguridad en el Trabajo, más de 22.000 globos rojos por cada accidente que, según sus cálculos, se evitó en 2009 en España. Un año en que hubo menos trabajadores muertos que en 2008 en Madrid (95, frente a los 134 del año anterior).
El hilo de la tragedia no se corta en la región: en 2009 murió un empleado cada cuatro días y hubo 560 accidentes graves. La proporción de siniestros por cada 1.000 trabajadores fue inferior a la media española (36,9 en Madrid y 38,6 en toda España), aunque en 2004 esta diferencia era todavía mayor (seis puntos). En el primer trimestre de 2010 fallecieron 28 trabajadores.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 29 de abril de 2010