La banca no para de reclamar una reforma laboral, mi duda es si quiere incluir también limitaciones al blindaje de los ejecutivos. Nos abrasa a base de comisiones, swaps, etcétera y ahora, está en su derecho, le pide al Gobierno que nos deje exangües. Es curioso que en esto se afanan precisamente los bancos que han tenido más beneficios en plena crisis.
Ahora que hemos visto lo que dio de sí la banca privada y que hasta el presidente de la patronal pidió un paréntesis en el capitalismo, ¿por qué los asalariados no aprovechamos para reclamar una banca pública que compita con la privada, como lo hace la televisión? Desde luego sin anuncios ni menaje. Esto sí que eliminaría el déficit público. Se imaginan todos los beneficios de la banca y todo el dinero que cobran los ejecutivos fuesen a parar al Estado, qué jugosas pensiones, dignos subsidios y maravillosas infraestructuras conseguiríamos. Vamos a empezar a repetirlo machaconamente como hacen ellos, a ver si cuela.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Sábado, 8 de mayo de 2010