"Precintado por la Autoridad Aeroportuaria. Para cualquier consulta, ponerse en contacto con el gabinete de dirección". Así rezaba el cartel que AENA, ente gestor de los aeropuertos españoles, pegó ayer en el hangar que el Real Aeroclub de Valencia tiene en los terrenos del aeropuerto de Manises. AENA ejecutaba con esta acción una orden judicial.
El Real Aeroclub, que lleva 75 años ocupando estos terrenos, ha presentado un recurso contencioso-administrativo para evitar que AENA los desaloje del segundo hangar. "Somos David frente a Goliat", se quejó el portavoz del club, Juan Granell.
La pesadilla para este club, en el que se han formado, según detalló Granell, 10.000 pilotos que vuelan por todo el mundo, comenzó a mediados de 1998, cuando expiró el convenio que mantenía con el ente estatal. AENA necesitaba los terrenos sobre los que se asienta el aeroclub para la segunda fase de ampliación.
"Creo que en el fondo lo que hay es un problema de burocracia", conjeturó Granell. Este directivo insiste en que no existe voluntad en AENA de solucionar este problema. "Nos ofrece trasladarnos a unos terrenos cuyo alquiler multiplica por 100 lo que pagábamos aquí. No quieren alcanzar una salida negociada", agregó.
AENA replicó en su día que la devolución del hangar estaba contemplada en el contrato que ambas entidades firmaron en 2004.
La nube altera L'Altet y Manises
La nube de ceniza procedente del volcán islandés Eyjafjalla volvió a complicar el pasado martes el tráfico en los aeropuertos valencianos de L'Altet y de Manises.
En L'Altet, las compañías aéreas cancelaron el martes 29 vuelos, la mayoría relacionados con los enlaces con Madrid, Sevilla, Asturias, Reino Unido y París. Las restricciones se produjeron por imposición del control aéreo de Barajas. Ayer, fuentes de AENA confirmaron que las operaciones no sufrieron ninguna alteración. Todo funcionó con normalidad.
El aeropuerto valenciano de Manises reabrió al tráfico aéreo en torno a las ocho de la mañana tras permanecer seis horas cerrado, desde las dos de la madrugada, a causa de la nube de ceniza, lo que obligó a cancelar dos vuelos. La decisión de reabrir el aeropuerto valenciano se adoptó de acuerdo con la información proporcionada por la agencia europea para el control del tráfico aéreo (Eurocontrol) sobre la evolución de nube volcánica. En Manises tampoco se produjeron alteraciones.
* Este artículo apareció en la edición impresa del Jueves, 13 de mayo de 2010